Al realizar el tercer capítulo fue difícil cumplir los deadlines porque El Feto y yo trabajamos en otras cosas para poder vivir, y por más que quería que cada capítulo demorara un mes en escribir, filmar y editar, con este fue complicado. Finalmente dos meses después ya lo hemos terminado. En este capítulo, Solo y Sola se conocen y explicamos un poco lo que ha ocurrido en México y el mundo a consecuencia del COVID. El capítulo presentaba retos distintos a los otros, es un capítulo para entender el universo, mucha información, diálogos, interacciones entre los dos protagonistas, pero lo más difícil es que tenemos fue filmar todo esto con una narrativa visual interesante dentro de un departamento.
Al realizar secuelas de cualquier proyecto, es difícil la continuidad porque siempre quieres hacer un mejor trabajo, siempre quieres superar lo que has hecho antes. Y con Muérete en Casa queremos justo eso, pero hay que entender la dinámica de una serie también, no todos los capítulos puede ser arriba y emocionantes, hay que bajar y subir, momentos lentos y momentos estresantes, diálogos y silencio. Al principio pensaba que era difícil lograr una mejora con este capítulo versus los anteriores por el valor de producción, este sería una sola locación, tendría más diálogo explicativo y dependeríamos un poco de la actuación (El Feto no es actor). Sin embargo ahora viendo los tres capítulos como una serie creo que funciona bien, es una narrativa tipo onda senoidal que va llevando al espectador.
Queríamos hacer un montaje de noticias para contextualizar y explicar rápidamente el daño del COVID en el mundo, para esto buscamos muchas referencias, como siempre, las referencias son importantísimas, vimos muchas escenas de montaje de noticias explicativas en películas como World War Z, 28 días después, Shaun of the Dead, al final nos gustó con el intro de Edge of Tomorrow y esa fue la mayor influencia.
Para poder hacerlo visualmente interesante teníamos que buscar maneras, una propuesta fue con la iluminación para el antagonista, decidimos colocarle una luz “teatral” roja para impulsar la amenaza, no era coherente, pero ayudaba al capítulo a cautivar y salir de los clichés. Fue muy sencillo con la Yongnuo YN360 porque con la aplicación puedes cambiar el color muy fácil.
También con la escena de acción buscamos opciones para hacerla más interesantes sin depender de una coreografía, pensamos la opción de romper una botella de azúcar para darle más peso al desenlace. Inicialmente intenté fabricarla yo mismo con tutoriales de YouTube pero me di cuenta que era más difícil de lo que pensaba, no encontraba los materiales necesarios y fracasé, así que recurrimos a Jose Jimenez Matilde, un colega de Pía, la protagonista. También nos ayudaron Benjamin y Andrea de nuevo en el maquillaje.
El proceso para la post fue:
Editar un corte en Premiere —> pasarlo a Pro Tools para hacer la música y sonido, aquí me doy cuenta de momentos que se pueden alargar por el suspenso de la música —> pasarlo de vuelta a Premiere para reeditarlo y así alargar momentos —> ya con esto se puede comenzar a hacer el color en DaVinci —> importar imagen colorizada y revisarla toda en Pro Tools para asegurarnos de tener todo en sincro.
Al tener el primer corte me deprimí porque no me gustaba, me parecía un poco absurdo. Sin embargo haciendo la música y sonido todo encajaba. Recordando el primer capítulo fue muy similar, el primer corte sin sonido ni música era cualquier cosa. Como he mencionado antes el sonido en terror juega un gran rol y a pesar de que lo puedo imaginar bien en edición, a veces mis inseguridades me ganan, pero echándole ganas en todo el soundtrack se ha podido lograr. Como siempre la postproducción fue una odisea, una carrera hasta el último segundo del deadline, trabajando la música, el sonido y el color, donde se hicieron cambios de edición hasta el último segundo.
Para estar enterados de los siguientes capítulos sigan a Muerete en Casa en Instragram.
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